viernes, 10 de septiembre de 2010

Comunicado sobre el conflicto educativo

Compañer@s y amigo@s de la Cátedra Abierta de Estudios Americanistas (FFyL,UBA): :

Hace ya más de un mes que varios colegios secundarios de la ciudad están tomados por los estudiantes, y desde hace una semana se incorporaron a la lucha, con sus propias demandas, los alumnos de varias Facultades de la UBA.

Más allá de los reclamos y formas de acción particulares de cada sector del estudiantado, creemos que es importante destacar la unidad del movimiento estudiantil y la solidaridad con sus objetivos por parte de la mayoría de la población, frente a las divisiones que se plantean desde los distintos ámbitos oficiales y oficiosos y de la campaña de calumnias de los aparatos del poder mediático.

Los estudiantes, docentes y no docentes de colegios y facultades no sólo reclamamos mejoras edilicias, aunque esto sea un grave problema de atención inmediata, sino en particular una clara política del Estado de fortalecimiento y de democratización del sistema de educación pública en todos sus niveles, dado que el mismo se encuentra cada vez más agredido y menoscabado por la desfinanciación oficial, la creciente privatización y la subordinación del conocimiento, la ciencia, la cultura y la educación a los intereses del mercado.

Como enseña la experiencia nacional y universal, el proceso de mercantilización no sólo destruye las instituciones y contenidos pedagógicos creados por la tenaz y esforzada lucha de las juventudes y los pueblos por una educación liberadora, crítica, pública y al servicio de los intereses de nuestros pueblos, como plantea la Reforma Universitaria desde 1918 en adelante, sino que en su lugar trata de formar élites de “profesionales” funcionales a los intereses neoliberales y antipopulares de las minorías del poder económico y político trasnacional.

Saludamos la eclosión movilizadora del movimiento estudiantil secundario y universitario, al que nos sumamos docentes, no docentes y movimientos populares, en esta batalla social, cultural y política que no es sólo por un edificio o un aula más, sino por la construcción conjunta de una Educación pública, gratuita, democrática, transformadora y con todos los recursos necesarios para contribuir al desarrollo espiritual y material colectivo de nuestra juventud y nuestro pueblo. Esta es la contribución que nos corresponde para aportar creativa y solidariamente a la unidad y soberanía de Nuestra América.


"Hay que abrir los estudios universitarios a los diplomados de la Escuela Normal. Hay que abatir las vallas que incomunican al profesorado primario con la Universidad, bloqueándolo dentro de los rígidos confines de la primera enseñanza. Que los normalistas entre a la Universidad. Pero no para aburguesarse en sus aulas sino para revolucionarlas. He aquí un hermoso programa para la juventud de Hispano-América, para la Unión Latino-Americana. Diferenciar el problema de la Universidad del problema de la escuela es caer en un viejo prejuicio de clase. No existe un problema de la Universidad, independiente de la escuela primaria y secundaria. Existe un problema de la educación pública que abarca todos sus compartimentos y comprende todos sus grados."

José Carlos Mariátegui (1894-1930) Los maestros y las nuevas corrientes